Video: Miriam La Santa & Millo
Texto: Dácil Hernández & Jose Niebla
Artista multidisciplinar, creativo inquieto, diseñador, estilista, ilustrador, interiorista, escaparatista, muralista… es complicado definir a alguien tan polifacético como Lauro Samblás, sin quedarse corto.
De niño pintaba sin parar con los folios y colores que le regalaba su padre. Su habitación estaba completamente empapelada con anuncios de revistas de moda de los 90, que él mismo recortaba y pintaba, comenzando a desarrollar, de manera inconsciente, uno de los pilares fundamentales que ha caracterizado su obra: el collage.
De esta infancia en el Puertito de Güimar (Tenerife), le viene su amor por el verano, por la luz y el paisaje de las Islas Canarias que tanto le inspiran, y que ha convertido en un elemento más de su obra. Caprichosas formas geométricas de colores vivos, que funcionan como las piezas de un extraño puzzle, en el que mezcla sin pudor, técnicas, soportes y materiales, y que ha conseguido que sean absolutamente reconocibles y únicas.
Hace ya más de 10 años que cogió su maleta, sus rotuladores, y se fue en busca de una Barcelona cosmopolita y moderna que le ofrecía todo lo que a Tenerife le faltaba.
Trabajó para varias marcas importantes, y fue escalando poco a poco hacia el éxito. Un acontecimiento inesperado dinamitó su imparable ascenso. Y en vez de parar, arrugarse, y bajar las alas, lo que sucedió fue todo lo contrario. Se movió más que nunca, viajó para nutrirse de otras influencias, conoció gente, e inició la creación de lo que Lauro es hoy. Un artista todo terreno. Un creativo que se vuelve loco con sus proyectos y los exprime con una energía que pocas personas tienen.
Desde entonces no ha parado de trabajar y de moverse. Ha trabajado para marcas como Adobe, Mango, Adidas, Neo2, Oysho, Schön mag, Desigual, Perrier, Paez…Su estudio está en su cabeza, después de casi medio año viajando por Asia, abriendo nuevos mercados, ha vuelto a Tenerife para diseñar la renovación total del Hotel Bitácora, en el sur de la Isla, que abrirá próximamente.
Lauro es un torbellino, un cometa imparable, un ‘si a todo’ constante que atrae como un imán la buena energía de todo lo que le rodea. Su secreto, según sus propias palabras, es el movimiento:
“Nunca te pares porque cada una de las cosas que haces te conecta con la siguiente”.
Y cuando cambia de un proyecto a otro, el negro y el blanco le ayudan a limpiar y empezar de nuevo.
Ahí está la clave.
Está sonando:
Télèpopmusik: ‘Breathe’